Florecen nuevas promesas en el deporte blanco

Como en los años setenta y ochenta se bañaron de gloria y llenaron las vitrinas con un sinnúmero de trofeos, Raúl Viver y el “Zurdo de oro” Andrés Gómez; en la actualidad el turno de representar dignamente al país corresponde a los hermanos Lappentti, Nicolás y Giovanni, que han sacado la cara por el Ecuador, obteniendo logros importantes en la élite mundial del deporte blanco.

Hoy por hoy el Ecuador tiene una nueva sangre triunfadora de jóvenes tenistas; Alejandra Álvarez, Nicole Martínez, Marie Elise y Bernardo Casares, Diego Hidalgo, Diego Acosta, Roberto Quiroz, Emilio Gómez y otras promesas del tenis, luchan diariamente entre el estudio y la practica deportiva para llegar a hacer la nueva generación del tenis ecuatoriano y representar al país en los torneos mundiales y alcanzar el top ten del rating mundial del deporte blanco.

Los futuros tenistas, quienes todo el día se encuentran, entre las aulas de clase, en sus diferentes colegios y en las canchas de entrenamientos de los country club. Afirman que es duro y complicado combinar los estudios con el entrenamiento, tal como indica Alejandra Álvarez, quien actualmente se encuentra cursando el cuarto año del colegio Americano y a su vez preparándose para la gira Sudamericana, que arrancará el próximo 11 de enero y ella será una de las representantes ecuatorianas.

Otro tenista que competirá en dicho torneo y por tal motivo su agenda juvenil se encuentra copada. Es el hermano de Marie Elise Casares, Bernardo, quien junto a su hermana participarán en el torneo internacional, que se disputará en Venezuela y otorgará puntos, tanto en las categorías masculinas como femeninas y le servirán para el escalafón mundial junior.

Así, como Álvarez y Casares, las otras promesas del tenis, también sudan la camiseta, para lograr ubicarse en el cuadro principal del COSAT (Confederación Sudamericana de tenis), y participar en las giras por tierras europeas, que se realizan todos los años.

Así, se forjan las nuevas estrellas del deporte blanco, para algún día convertirse en grandes representantes del país y continuar dando alegrías al Ecuador, como ya lo han hecho los tenistas de antaño. Así, es el árbol genealógico del tenis, unos se retiran, dejando todo el entusiasmo a los que viene hacia atrás y que intentarán emular y superar sus pasos.

Fuente:

· Diario “El Comercio”, sección 3 Deportes, Cultura, Espectáculo y Clasificados, fecha de la publicación jueves 07 de enero de 2010, pág. 21 del cuaderno 3.

Foto: diarioexpreso.com martes 15 diciembre de 2009, Carlos Silva.